SOCIEDAD / LA IMPORTANCIA DE VOTAR IZQUIERDA


 Estas elecciones europeas son determinantes para el futuro de una Europa que, si no lo impedimos, tendrá una deriva claramente derechista porque el fascismo se extiende como una hidra por el continente y la llamada derecha moderada va a acabar siendo fagocitada por los ultras.

El fascismo gobierna ya en Italia con la musoliniana Meloni, en Hungría, con el prorruso Orban, en Polonia y se prepara para dar el asalto al poder en Francia con Marine Le Pen posiblemente en los próximos comicios. Un fascismo que, como hace VOX en España, estrecha la mano de un genocida como Netanyahu que tiene las manos manchadas por la sangre de miles de inocentes, y estrechar esa mano es no condenar la masacre que Israel está perpetrando contra el pueblo palestino. Un fascismo dividido en Ucrania porque mientras los países integrados en la OTAN siguen armando al país invadido, apostando por prolongar la guerra, otros, como Orban, son permisivos con Putin. Así es que en estas elecciones al Parlamento Europeo nos jugamos, entre otras cosas, seguir esta deriva belicista que se prepara para una conflagación mundial contra Rusia, con consecuencias inimaginables, o apostar por cerrar esa guerra que ya dura dos años con un acuerdo de paz.

Europa no puede mirar tampoco hacia otro lado con lo que sucede en Gaza, la mayor fosa común a cielo abierto, ni en Palestina, un espantoso genocidio que cuenta con la complicidad de Estados Unidos. Urge que Europa no se limite a condenas sin consecuencias contra Israel, sino que se implementen todo un rosario de sanciones económicas y hasta la ruptura de relaciones diplomáticas con un país que viola sistemáticamente los derechos humanos y está gobernado por un tamden fascista. 

Las energías limpias, la protección del medio ambiente, la política social, la tributsria, la sanitaria y la gestión de la migración separan derechas de izquierdas. Es en este último punto en donde las discrepancias son mayores por la asociación que hace la derecha entre delincuencia y migración. Europa, con una tasa muy baja de nacimientos, necesita migrantes pero también una racional distribución de los mismos, pues son precisamente los países que no tienen esa presión, como Polonia, Eslovenia, Chequia, Hungría, los más xenófobos. 

En España, contra la pinza  PP VOX que ha hundido el diente en la persona de la mujer del presidente del gobierno para derrocarlo, estamos asistiendo, y no es desde hace días sino desde hace años, a un deterioro de un sistema judicial mayoritariamente conservador que ya no se esconde a la hora de hacer política.  Lo hizo contra los políticos golpistas del Procés y contra Podemos instruyendo una batería de causas que luego fueron archivadas pero cumplieron con su cometido de laminar a la formación morada. Jueces como García Castellón o Peinado, entre otros, dan la sensación de ser más militantes de partido.que magistrados. Y todo esto cuando todavía se sigue sin saber quién era un tal M. Rajoy que cobró dinero  negro de la Caja B del PP.  Esta doble vara de medir hace que la justicia y su credibilidad sean una de las mayores preocupaciones de la ciudadanía. 

El gobierno de progreso de izquierdas que se ha dado este país en las últimas elecciones está siendo asediado por tierra, mar y aire por una derecha que no asume estar en la oposición. Jueces de ética más que dudosa, periodistas que no atienden al código deontológico de su profesión y divulgan burdas mentiras, medios de comunicación que los replican, organizaciones ultraderechistas, el poder económico y ese binomio formado por PP VOX quieren tumbar el gobierno que más medidas sociales ha tomado en favor de la población y que está sólo contra todos los poderes fácticos.  Más que nunca hay que votar izquierda para parar el fascismo rampante. Al gobierno de España sólo le quedan sus votantes. 

Comentarios

Entradas populares